Es evidente que las pancartas no sirven, si no pueden colgarse en algún lugar. Aquí es donde los ojales tienen gran importancia (no confundirlo con Gromit, el personaje de la animación). ¿Van a diseñar una pancarta y piensan marcar manualmente la ubicación de los orificios de ojal? Si es así, van a complicarse las cosas más de lo necesario.
Los ojales se usan para cortinas de ducha, lonas, cordones del calzado… y para rotulación y pancartas. Son las anillas que refuerzan los orificios usados para colgar un rótulo o una pancarta, y evitar que el material se desgaste o se rasgue. Naturalmente, ustedes ya lo sabían. Pero lo que muchos proveedores en el sector de la impresión no saben - o no tienen en cuenta - es que ya es totalmente innecesario marcar las ubicaciones de los ojales manualmente después de imprimir el rótulo o la pancarta, aparte de la nula rentabilidad de hacerlo así.
Realmente, ahora ya no es necesario añadir manualmente las marcas de ojal. No se preocupen, si lo desean aún pueden aplicarlos también con una potente pistola aplicadora de ojales. Pero ya no es necesario medir y marcar manualmente su ubicación exacta si tienen instalado un software como i-cut Suite. ¡Piensen en el tiempo precioso que ganarán y los errores en que ya no caerán! Gracias a la tecnología, ¿verdad?
Indistintamente de lo pequeños que sean, los ojales pueden interferir con el diseño si no se tratan con gran cuidado. Los diseñadores de rotulación perfeccionistas ya saben que existen diferentes tipos de ojales: los de goma, los de plástico y los de metal, cada uno con sus propias ventajas – y colores. Si bien los ojales de metal son más duraderos que los de goma y de plástico, sus colores generalmente están limitados a plata y latón, mientras que los de goma y plástico tienden a estar disponibles en una gama de tonos mucho más amplia. A tener en cuenta: puesto que los ojales se colocan en el dobladillo del cartel o pancarta, cuiden de que su diseño no llegue totalmente hasta los bordes.
